viernes, 23 de julio de 2010

Basquet | argentina tiene pilcha nueva para el mundial

El reglamento permite hasta 12 jugadores. Igual, con estas nueve no perdemos.

El reglamento permite hasta 12 jugadores. Igual, con estas nueve no perdemos.

Marcelo G. Nogueira Mnogueira@ole.com.ar
| 23-07-2010

Presentación no tradicional de la nueva indumentaria, en la búsqueda de mayor difusión.

Hasta no hace mucho, un evento de estas características, empezaba con la conducción de la ceremonia a cargo del presidente de turno de la CABB y agradeciendo “a los dirigentes, periodistas y jugadores aquí presentes”, todo en un salón acondicionado de la entidad.

Ahora, en la búsqueda de mayor difusión y para que el básquetbol trascienda la frontera de los medios tradicionales, el actual titular de la CABB, Germán Vaccaro, giró 180° la política de comunicación. “Yo sé que siempre vamos a estar en Olé, Clarín y La Nación pero necesitamos llegar a más gente por otros medios, porque nuestro seleccionado tiene que ser más conocido”, aseguró.

Es, también, la necesidad de agrandar el negocio para sostener una estructura costosa a partir de la gran actividad internacional de los distintos seleccionados, hombres y mujeres, desde los 15 años hasta los mayores.

Entonces, el lugar elegido es el Módena y la conducción está a cargo de Pamela David que, en tres momentos distintos de la fiesta, pide que la inviten al Mundial de Turquía, mientras la nueva indumentaria la muestra Karina Jelinek, Alejandra Maglietti y un seleccionado -sin base ni pivote- de mocosas que dirige el representante de modelos Leandro Rud. Oveja Hernández, Carlitos Delfino y Leo Gutiérrez, miran, no juegan.

Por ahí se muestra Héctor Speranza, Tito, el ex guardaespaldas de Ricardo Fort, que habla y dice que se va temprano porque tiene un partido. Sí, juega en Arquitectura, en la B de Capital. Y también se muestra Lorena, de Gran Hermano I. ¿Te acordás, hermano? A algunos integrantes de “la familia del básquet” la movida no le resulta cómoda, están inquietos. Pero, al menos anoche, Vaccaro consiguió lo que busca: nunca hubo tantas cámaras y movileros corriendo a una Oveja.

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